Hace un tiempo, me interesé mucho en el tema del autismo y cómo la nutrición puede influir en el desarrollo cerebral. Cuanto más investigaba, más me daba cuenta de que lo que comemos tiene un impacto enorme, no solo en el cuerpo, sino también en la mente. He leído mucho sobre esto, y uno de los expertos que más me ha ayudado a entenderlo es el Dr. David Perlmutter, un neurólogo que explica muy bien cómo ciertos alimentos y nutrientes pueden mejorar la salud cerebral y, en algunos casos, ayudar a niños con autismo.

¿Por qué es tan importante la nutrición para el cerebro?

El cerebro en desarrollo necesita un montón de nutrientes para funcionar bien. Vitaminas, minerales y grasas saludables son esenciales para que las neuronas crezcan y se comuniquen entre sí. Si faltan esos nutrientes, el cerebro puede tener problemas para desarrollarse correctamente.

El Dr. Perlmutter dice que “las dietas modernas están llenas de carbohidratos refinados y pobres en grasas saludables, lo que afecta al cerebro”. En su libro Brain Maker, habla mucho sobre cómo el intestino y el cerebro están conectados, y cómo un intestino sano puede ayudar a que el cerebro funcione mejor.

Nutrientes importantes para el cerebro

  1. Ácidos grasos omega-3 Los omega-3, que se encuentran en pescados como el salmón y las sardinas, son esenciales para el cerebro. Varios estudios han mostrado que los niños que no consumen suficientes omega-3 pueden tener problemas de atención y aprendizaje.
  2. Vitaminas del complejo B Las vitaminas B6, B9 (folato) y B12 ayudan a que las neuronas se comuniquen mejor. Cuando hay deficiencia de estas vitaminas, es más probable que el niño tenga problemas de concentración y comportamiento.
  3. Zinc El zinc es otro mineral muy importante. Ayuda a que las neuronas crezcan y se conecten. Un estudio que leí mostraba que muchos niños con autismo tenían niveles bajos de zinc.
  4. Magnesio El magnesio es clave para mantener la calma. Ayuda a reducir la ansiedad y mejora el sueño, algo que muchos niños con autismo necesitan.
  5. Probóticos y prebóticos Estos ayudan a mantener un intestino sano. Según el Dr. Perlmutter, un intestino sano significa un cerebro más sano. Los probóticos son bacterias buenas y los prebóticos son las fibras que las alimentan.

Lo que dicen los estudios sobre nutrición y autismo

Uno de los estudios más interesantes que encontré fue uno del Journal of Child Neurology, que mostró que dar suplementos de omega-3 a niños con autismo mejoró su comportamiento y redujo los movimientos repetitivos. También leí otro estudio en Nutrients que decía que una dieta rica en antioxidantes puede reducir la inflamación del cerebro, algo que se ha visto en muchos niños con autismo.

La Dra. Martha Herbert, de la Universidad de Harvard, dice que el autismo no es solo genético, sino también una condición metabólica. Ella recomienda probar dietas sin gluten y sin caseína para ver si hay mejoras en los niños con autismo.

Dietas que podrían ayudar

  1. Dieta cetogénica La dieta cetogénica es alta en grasas saludables y baja en carbohidratos. Se ha usado mucho para tratar la epilepsia y algunos estudios sugieren que también podría ayudar a niños con autismo.
  2. Dieta sin gluten ni caseína Esta dieta elimina el gluten (presente en el trigo) y la caseína (una proteína de la leche). Muchos padres han reportado mejoras en el sueño, la atención y el comportamiento de sus hijos tras seguir esta dieta.
  3. Dieta antiinflamatoria Se basa en comer muchas frutas, verduras, pescados y evitar alimentos procesados. La idea es reducir la inflamación en el cuerpo y el cerebro.

Suplementos que pueden ser útiles

Además de una buena dieta, algunos niños pueden beneficiarse de suplementos. Siempre es importante consultar con un profesional antes de empezar.

  • Omega-3: Ayuda al cerebro y reduce la inflamación.
  • Multivitamínicos: Aseguran que el niño reciba todos los nutrientes que necesita.
  • Magnesio y zinc: Mejoran el sueño y el comportamiento.
  • Probóticos: Mantienen el intestino sano, lo que puede influir en el cerebro.

La relación entre el autismo y la nutrición es un tema muy interesante. Aunque aún falta mucho por investigar, creo que una buena alimentación puede marcar una gran diferencia en la vida de los niños con autismo. No se trata de buscar una cura, sino de darles las mejores herramientas posibles para que puedan desarrollarse mejor. (Todos estas conclusiones son sacadas de los diferentes estudios realizados que al final del post muestro**

Si eres padre o madre de un niño con autismo, te animo a que hables con un nutricionista especializado. Puede ser un gran paso para mejorar la calidad de vida de tu hijo. ¡La nutrición es una herramienta poderosa!

Referencias:

Perlmutter, D. (2015). Brain Maker: The Power of Gut Microbes to Heal and Protect Your Brain. Little, Brown Spark.

S.J. Geniuset et al.,» Celiac Disease Preventing as Autism», Journal of Child Neurology 25 núm 1 ( enero de 2013) pp.114-119

p. Whitleley et al., » a Gluten-Free diet as an Intervention for autism and associated Spectrum Disorderss: Preliminary Findings», Autism 3 núm.1 (marzo 1999) pp. 45-65

Herbert, M. (2005). «Autism: A Brain Disorder, or a Disorder That Affects the Brain?» Clinical Neuropsychiatry.